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Cómo elegir luces para bicicleta

Cómo elegir luces para bicicleta

¿Cuántas veces salimos a montar en bicicleta a realizar nuestro entrenamiento después de la jornada laboral, o simplemente nos desplazamos por ciudad y se nos hace tarde?  Esto sucede sobre todo en el horario de invierno ya que nuestras horas de luz son más cortas.

Por eso, algo que es fundamental para nuestras seguridad, y casi tanto como lo puede ser el casco de la bicicleta, son las luces de bicicleta.

Además de ser también una norma de circulación en bicicleta establecida de la DGT.

Pero… ¿Sabemos qué tipo de luces elegir según el uso que le hacemos?

Índice de contenidos:

  • ¿Qué son los lúmenes?
  • Elegir las luces de bicicleta según tus necesidades.
  • Soporte, también de suma importancia
  • Impermeabilidad

¿Qué son los lúmenes?

No podemos comprarnos una luz para bicicleta sin antes saber este término, ya que es un aspecto muy importante a la hora de escoger una que nos venga bien.

El lumen tiene que ver con la cantidad de luz que irradia, es decir, nos indica la cantidad de brillo que es capaz de emitir la luz. Con lo cual, a mayor número de lúmenes, mayor intensidad lumínica tendrá la luz.

Mientras que en las luces traseras (de color rojo) nos podremos encontrar rangos entre 5 y 100 lúmenes, para las luces delanteras (en color blanco) los rangos son mucho mayores, pudiendo oscilar entre los 10 y cientos de miles de lúmenes.

Para llevarlo a términos del día a día y podáis comparar, la luna llena en una noche despejada y clara tendría la equivalencia a 1 lumen, vuestra luz trasera del móvil, la que usamos de linterna, está alrededor de los 20 lúmenes y un las luces delanteras de un coche medio rondan los 1200 lúmenes.

 

Elegir las luces de bicicleta según tus necesidades

Si eres de las personas que te gusta pedalear por lugares que no tienen alumbrado y es la oscuridad la que predomina, lo ideal es hacerse con luces que superen los 500 lúmenes y cuyo haz se abra lo suficiente como para ver a los lados de la carretera pero sin que deslumbren a los vehículos que se aproximen de frente.

Algunos modelos indicarán que son ideales para circular por lugares que NO sean la carretera, las cuales, no recomendamos usar precisamente por carretera, puesto que muy probablemente puedan deslumbrar a los que vengan hacia ti. Aunque también es cierto que existen luces que te permiten disminuir su intensidad, lo cual sí te pueden ayudar a no deslumbrar a esos conductores.

Por otro lado, si habitúas a montar por senderos, lo ideal sería llevar luces de más de 1200 lúmenes.

Si por el contrario, circulas por carreteras perfectamente iluminadas, con una luz delantera que esté entre los 50 y los 200 lúmenes tendrás suficiente.

Soporte, también de suma importancia.

Tan importante es llevar la luz correcta como un soporte de calidad. Debemos tener en cuenta que mientras circulamos, pasaremos por multitud de baches, sobre todo si vamos por caminos. Por eso es importante que el soporte pueda ir correctamente sujeto para que la luz no se mueva, ya que estar colocándola constantemente mientras vamos en bicicleta, además de incómodo es peligroso.

Con la mayoría de las luces traseras no habría problemas, ya que suelen ser luces más pequeñas y como en su mayoría van cogidas a la tija, no suelden dar problemas, pero las luces delanteras, al ser alargadas y tener más peso, si es más fácil que se venzan hacia delante, con lo que lo ideal es que sea un soporte que se pueda apretar al manillar tanto como desees.

Por otro lado, sin son luces más pequeñas, los soportes suelen ser correas de silicona, que se montan y desmontan fácilmente y no se mueven excesivamente al tener estas menos peso.

Impermeabilidad

Muchas regiones de España son zonas de abundante agua, por eso otro aspecto a tener en cuenta es contar con luces con un coeficiente de impermeabilidad correcto.

Estos se miden con el estándar  IP. No recomendaríamos comprar una luz con un IP inferior a 64, siendo IP64 lo mínimo recomendable, y a medida que aumenta la escala, mayor impermeabilidad tendrá, incluso yéndonos al IP67, el cuál son luces capaces de soportar una inmersión de hasta 1 metro.

 

 

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